Aprendizaje social y emocional: énfasis en todas las necesidades de los estudiantes

Nombre: CNS-AprendSoc. 1490 palabras. Por Taylor O’Connor

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PHOENIX – Un lunes de abril, Kayla Treon se sentó con cinco estudiantes de tercer grado en Cactus View Elementary School al norte de Phoenix para hablar sobre los mecanismos de confrontación de las emociones. Juntos, organizaron varias emociones cada una bajo “zonas” identificadas por diferentes colores: la tristeza bajo la zona azul, el enojo bajo la zona roja, el entusiasmo bajo la zona amarilla y la felicidad bajo la zona verde.

Treon es una especialista del aprendizaje social y emocional, un nuevo enfoque adoptado por el Distrito de Escuelas Públicas de Paradise Valley, para el cual trabaja y que tiene el objetivo de ayudar a los estudiantes para que desarrollen sus identidades y sepan manejar sus emociones, actitudes y relaciones con otros estudiantes; y, así, alcancen sus objetivos personales y académicos.

Treon es una de las 27 personas involucradas en el programa, que no es obligatorio pero tiene el apoyo logístico del Departamento de Educación del Estado. El distrito de Paradise Valley empezó a implementarlo de manera gradual en 2019. Pero después de la pandemia, el ritmo se hizo tan rápido como “la velocidad de la luz”, dijo Treon en una entrevista inglés.

“Salimos de vacaciones en primavera y nunca regresamos”, añadió. “Inmediatamente, nuestro distrito tomó iniciativas del superintendente para priorizar la ayuda de los estudiantes y crear conexiones para sentirse apoyados y asegurar que los padres se sientan apoyados también”.

Durante la reunión con los cinco niños, los cuales tienen problemas de comportamiento, Treon continuó el ejercicio con una discusión de las maneras saludables para regresar a la zona verde, la de felicidad y tranquilidad. Los estudiantes ofrecieron varios ejemplos: hablar con un amigo o padre, dar un abrazo a alguien, llorar, lanzar su almohada, o respirar hondo.

Treon enfatizó que es importante que las emociones negativas no influyan en las personas a su alrededor. La lista de zonas y sus respectivas emociones, escritas en una tabla, es para que los estudiantes estén preparados para lidiar con emociones fuertes.

Treon se ha reunido una vez a la semana con un grupo de cada grado en Cactus View Elementary School y en Sunset Canyon Elementary School. También, una vez al mes, ella ha visitado cada clase de cada grado para una lección de aprendizaje social y emocional.

“Se necesita vulnerabilidad para sentirse cómoda con temas incómodos y yo lo estoy”, dijo Treon. “Disfruto trabajar con estudiantes que tienen emociones sombrías o si tienen problemas en su casa, ya sea por negligencia, abuso, divorcio, o solamente la soledad dado al COVID-19. Las habilidades fundamentales son cruciales”.

Ella trabajaba con Jon Bowen, el especialista del aprendizaje social y emocional para el distrito, parte de un equipo de 27 personas en total. Antes de este puesto, Bowen trabajó como un profesional del mundo educativo por más de 20 años y también trabajó como psicólogo para las escuelas.

Bowen dijo que el verano de 2020, antes del año escolar, fue lo más extraño de su carrera. Fue un tiempo incierto porque las escuelas cerraron después del descanso de la primavera y nunca regresaron. El distrito quería un énfasis en el aprendizaje social y emocional.

“El ímpetu, creo, realmente vino de nuestros maestros”, dijo Bowen en inglés. “Nuestros maestros realmente nos estaban diciendo ‘hay muchas más necesidades, más allá de la necesidad de instrucción’. Las dificultades académicas en el distrito escolar realmente se escuchaban y fuimos capaces de construir eso. Ha sido muy interesante hacerlo en medio de una pandemia”.

Durante el distanciamiento social, muchos adultos en el mundo académico y en general aprendieron sobre la importancia del aprendizaje social y emocional para los estudiantes. Este cambio de perspectiva presentó una oportunidad para enfatizar el desarrollo del programa de aprendizaje social y emocional.

El énfasis empezó con una conversación con los profesionales del aprendizaje que están trabajando en las escuelas, como Treon, y trabajando con los equipos de las escuelas para crear planes de acción para satisfacer las necesidades de los estudiantes, las comunidades y los maestros.

“El aprendizaje social y emocional no puede estar solamente en un departamento”. dijo Bowen. “El departamento de finanzas debe recibir algo de educación sobre el aprendizaje social y emocional, porque queremos asegurar que recibimos el financiamiento. Una parte grande de mi apoyo este año es para asegurar que tenemos todo el mundo a bordo para entender qué es el aprendizaje social y emocional y entender la importancia”.

En el caso de Treon, las conversaciones ayudaban a identificar quien tiene problemas de comportamiento en la escuela para implementar las sesiones pequeñas.

Para formar el currículum del aprendizaje social y emocional, Paradise Valley usa el Colaborativo para el Aprendizaje Académico, Social y Emocional. Es el sitio principal de recursos sobre el aprendizaje social y emocional, dijo Bowen.

El currículum usa cinco competencias: el conocimiento de sí mismo, la dirección de sí mismo, habilidades sociales, habilidades de la toma de decisiones, y habilidades de relaciones. Las maestras usan las competencias para medir el éxito. Estas competencias van a ocurrir a través de toda la vida y es importante que los niños entiendan el aprendizaje cada día en la clase, dijo Bowen.

En las clases, el programa del aprendizaje social y emocional está incorporado a las lesiones académicas. Dani Crafton, una maestra de quinto grado en Cactus View Elementary School, incorporaba la mentalidad de crecimiento, la manera en que los estudiantes enfrentan los desafíos y los contratiempos.

Cada mañana por 10 minutos, Crafton tenía una pregunta de reflexión en el pizarrón blanco y los estudiantes reflejaban en sus diarios que recibieron el primer día de la escuela. Después de algunos minutos de escribir, la clase y Crafton tuvieron una discusión.

“Siento que, a un cierto punto, estas discusiones fluyen naturalmente. Cuando los estudiantes están lidiando con algo, ya sea soy yo quien les está diciendo que son capaces o alguien más diciéndoles, ‘oye, solo por que no puedas hacerlo ahora, no significa que nunca lo podrás hacer’”, dijo en inglés Crafton.

Específicamente, los estudiantes se chocaban en las matemáticas. Crafton dijo que puede ver las mejoras en la mentalidad de crecimiento porque los estudiantes están leyendo sus apuntes para ayuda en vez de abandonar las tareas.

El aprendizaje social y emocional es crucial por otras razones también, dijo Treon.

“Siempre nos hemos concentrado en lo académico, la enseñanza está muy basada en lo académico pero tienes que pensar en el niño entero. Necesitas pensar en sus necesidades emocionales, necesidades sociales y cómo eso últimamente puede afectar su rendimiento académico”.

Para el distrito de Paradise Valley, una meta del aprendizaje social y emocional es sostener el programa, dijo Bowen. Él quiere continuar apoyando las escuelas y toma el momento para desarrollar el programa.

Afuera del distrito, una manera que ayuda el desarrollo del programa del aprendizaje social y emocional es un cambio a la política para el currículum.

Ahora mismo, hay un énfasis en el aprendizaje social y emocional en el Departamento de Educación del Estado con la Superintendente Kathy Hoffman, que formaba equipos para ayudar a los distritos en el entendimiento de este tipo de aprendizaje y abogar por un cambio en los requisitos de educación en Arizona.

Rebecca Astorga, miembro del nuevo equipo de seguridad de la escuela y bienestar social, que es una parte de la división de la equidad, la diversidad y la inclusión del Departamento de Educación del Estado.

El departamento formó pareja con los expertos del Colaborativo para el Aprendizaje Académico, Social y Emocional, y así tener las competencias del aprendizaje y además para tener las investigaciones que muestran los beneficios del aprendizaje social y emocional en la clase.

Astorga dijo en inglés que “el mensaje de tener las competencias del aprendizaje social y emocional para nuestro estado se está elevando a un nivel donde hay un idioma compartido; sin embargo, las competencias del aprendizaje social y emocional son solamente competencias, no son requisitos, son voluntarias”.

Astorga dijo que ella y su equipo trabajaban para informar a los distritos escolares sobre los beneficios del aprendizaje social y emocional en un sitio de internet. En su portal, hay una página que describe cómo financia el programa del aprendizaje, y las instrucciones para implementar un currículum del aprendizaje social y emocional en su mismo distrito.

Arizona es un estado de control local, eso significa que todos los distritos escolares necesitan tomar la decisión para implementar el currículum del aprendizaje social y emocional que benefician su comunidad. El Departamento de Educación del Estado no sabía el número de distritos que implementaron el aprendizaje social y emocional en su currículum.

Hay esperanza en un aumento de distritos que usen el aprendizaje social y emocional, especialmente después de la pandemia.

“Lo veo expandiéndose a través de Arizona y a través del país”, dijo Treon. “Es la historia del pequeño motor que puede subir a la colina y que ha sido un esfuerzo en conjunto con la educación pública y la Asociación Americana de Consejeros Escolares”.

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Niño pintando círculos de colores que reflejan diferentes emociones. (Foto de archivo Cronkite Noticias)